Hacienda y la Sopa de Ganso

Consecuencias de declarar fuera de plazo y no cuadrar lo declarado en el SII

Recientemente, he escrito un par de artículos relacionados con el plazo para declarar las facturas en el SII y sugerencias sobre la revisión del mes y ver que lo que se presenta cuadra (contabilidad, 303 y SII). Ambos artículos han tenido bastante aceptación, especialmente el del cuadre, y algunas personas me han escrito contándome sus experiencias. Una de ellas me ha llamado bastante la atención.

Se trata de una filial de una empresa internacional que factura más de veinte millones de euros al año. Está obligada al SII y antes al 340, desde hacía ya unos cuantos años. Sin embargo, la dirección española de esta empresa tiene tanto «desprecio» a la contabilidad, en el mejor sentido de la palabra, si es que lo tiene, que no le dan absolutamente ninguna importancia ni a la contabilidad, ni a los impuestos, ni a las obligaciones formales de ningún tipo. Llevan años haciendo la contabilidad de cualquier manera, inventándose las cifras una y otra vez, declarando lo que les parece en cada momento, sin importar si la contabilidad está bien, si ésta cuadra con el 303 y con el SII y, por supuesto, subiendo al SII las facturas que les parecen y una vez al mes o más distanciado en el tiempo aún. Por supuesto, nada de indicar las claves correctas en cada registro y tampoco coinciden los períodos ni las fechas de las facturas, ni siquiera los importes. Absolutamente incomprensible.

Ni qué decir tiene que la información financiera que reportan mensualmente a la matriz está totalmente falseada, desconociendo lo que realmente ocurre.

Cuando el contable de esta empresa me lo estaba contando, no daba crédito. Es más, no entiendo cómo se pueden cometer ciertos fallos que, a mi entender, son ilógicos. Puedo entender que no quieran declarar las facturas cada cuatro días y lo hagan una vez al mes. Bien, un acto de rebeldía, pero lógico. ¿Pero que no cuadren las fechas, los períodos y los importes? ¿Que lo que sale de contabilidad se desvirtúe tanto al traspasarlo a Excel y al traspasarlo a una plataforma de envío? ¿Cómo lo hacen? Personalmente, no lo concibo. Son miles de registros al mes y no hay nadie que revise nada y, lo que es peor, les da exactamente igual.

Obviamente, un día llegó hacienda con las rebajas. Empezaron a llegar requerimientos que no han atendido, porque «las cosas de administración no importan», lo único que importa es vender. Claro, como administración es un departamento que no es productivo, ¿verdad? ¿Para qué? Es más, ¿para qué van a comprar un programa contable? No ya un ERP, sino un simple programa contable, ya que lo que utilizan es un ERP extranjero de los «ochenta» que no se ajusta a la normativa española. No tiene diarios, ni mayores, ni libros de IVA… ¿Cómo se pueden facturar más de veinte millones de euros año tras año y no tener siquiera un programa contable, aunque sea básico? Ni asesoría. Incomprensible.

Me decía el contable, que en esta empresa se siente como si estuviera metido dentro de una película de los Hermanos Marx. A la empresa en cuestión la llama «Sopa de Ganso».

Dice que las reuniones de la empresa son como el Consejo de Ministros de «Sopa de Ganso». Aquí está la escena.

Consejo de Ministros – Sopa de Ganso

También dice que la famosa escena de «Una noche en la ópera», la parte contratante de la primera parte, describe a la perfección el día a día de la empresa con las obligaciones formales respecto a la contabilidad, fiscalidad y cualquier asunto legal, en general. Ésta es la escena.

La parte contratante – Una noche en la ópera

Han pasado más de dos meses desde el último requerimiento de hacienda y aún no han contestado a ninguno.

No sé cómo acabará esta empresa, pero, si sigue por ese camino y no cambia la cultura empresarial, no le auguro un buen final. Imagino que hacienda empezará por reclamar cuotas y sancionar, inicialmente. Pero, cuando vea realmente lo que está ocurriendo, regularizará por bases estimadas, sancionará por no llevar contabilidad ajustada al Código de Comercio y puede que acabe con delito fiscal y/o blanqueo de capitales. Derivará a otros organismos competentes en otras materias. Quizá se declare en concurso de acreedores, les reclamarán responsabilidades civiles y penales a los administradores, estafa hacia la matriz y hacia terceros en España, como bancos o acreedores, etc.

Espero que el contable (persona honrada a la que no permiten trabajar bien y que está muy angustiado con esta forma de trabajar desde que entró), encuentre pronto otro trabajo y pueda marcharse de allí.

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